lunes, 31 de marzo de 2014

Conejo al ajillo

El conejo al ajillo es un plato típico de muchas regiones de este país y sin duda en cada zona tiene su peculiaridad pero en todas ellas es un plato para chuparse los dedos.


La carne de conejo es una carne blanca muy sana porque apenas tiene grasa y, aunque a veces está un poco olvidada, os aconsejo incorporarla a vuestras mesas porque os sorprenderá las posiblidades que ofrece.

INGREDIENTES (para 2 personas):

- 1 conejo entero (no muy grande)
- 6 o 7 dientes de ajos
- Aceite de oliva virgen extra
- 1 vaso de vino blanco (yo utilicé un  Pedro Ximenez)
- Sal y pimienta
- Perejil picado


PREPARACIÓN:

Lo primero será tener preparado el conejo. En la carnicería te lo dan trocedado por lo que apenas supone esfuerzo. 

Lo siguiente será salpimentarlo al gusto.


En un sartén ponemos un buen chorro de aceite de oliva y en éste incorporamos tres dientes de ajos enteros sin pelar (se pueden machacar un poco con la mano) para que el aceite coja sabor.


Cuando estén empezando a dorarse incorporamos a la sartén el conejo. En un primer momento el fuego será fuerte porque nos interesa que se dore bien por fuera.


Una vez que veamos que está doradado, bajaremos el fuego a temperatura media-baja y le incorporaremos el resto de ajos. A mi en esta ocasión me gusta picarlos, pero también podéis echarlos en láminas o enteros.


Una vez dorados los ajos le añadimos el vaso de vino. El vino utilizado puede ser un vino blanco. Yo en esta ocasión me decanté por un Pedro Ximenez que le da un tono más oscuro a la salsa y un sabor muy peculiar que me encanta.


Dejaremos que se haga bien el conejo durante 30-40 minutos (según el tamaño del conejo) hasta que el conejo quede blandito y la salsa se caramelice.

Al final podemos incorporar un poco de perejil picado.


Es un plato para chuparse los dedos y sobretodo para mojar pan. La carne queda muy tierna y sabrosa. 

Ya sólo falta acompañarlo con una buena ensalada y tendremos un menú perfecto al que nadie podrá resistirse.

¿Os animáis a probar?

lunes, 24 de marzo de 2014

Crema catalana

Llevaba tiempo queriendo incluir esta receta y reconozco que me daba pereza ponerme, y no será porque no sea fácil (todos los ingrediente al vaso de la thermomix y listo), sino porque al final optaba por otros postres.


Como sabéis es un postre típico catalán pero que ya se ha extendido por toda España. Está basada en las yemas de huevo y sobretodo en esa capa de azúcar quemado que la cubre. Una oportunidad perfecta de poder usar el soplete (me encanta).

Aún así pongo la receta sin la thermomix para que a nadie le dé pereza, aunque reconozco que para este tipo de postres nos ahorra mucho tiempo y esfuerzo.

INGREDIENTES:

- 8 yemas de huevo
- 1 litro de leche
- 160 grs. de azúcar
- 45 grs. de maicena
- Pizca de canela
- Pizca de ralladura de limón
- Azúcar para quemar con el soplete.


PREPARACIÓN (en Thermomix):

Todos los ingredientes (salvo el azúcar para quemar) al vaso y programamos 9 minutos a 90 ºC a velocidad  4.


PREPARACIÓN (Clásica):

En una olla ponemos todos los ingredientes (salvo el azúcar para quemar) y pasamos la batidora para quitar todos los grumos.

A continuación las ponemos a fuego medio y con una varillas y sin parar de mover vamos removiendo para que no se peguen. Estarán listas cuando consigamos la textura que más nos guste (deben de quedar espesitas).

¤¤¤¤¤¤

Vertemos en boles o cazuelas de barro (yo no tenía y quedan mejor) dejamos que templen y tapamos con un film para llevarlas al frigorífico a que se enfríen del todo.


Justo antes de servir y ayudándonos de un soplete espolvoreamos azúcar por encima y quemamos hasta conseguir una costra de caramelo.


Ya veréis que bueno el contraste de la crema fría y el caramelo crujiente y calentito. Una auténtica delicia para los sentidos. 

¿Os animáis a probar?

lunes, 17 de marzo de 2014

Risotto de jamón (en olla rápida)

Hoy una receta que si la probáis estoy convencido que repetiréis porque a pesar de ser un risotto no hay que estar dándole vueltas, es más se hace en pocos minutos y el resultado es sorprendente.

 

La receta la encontré por casualidad en la web del El cocinero fiel y desde entonces la hago habitualmente, y ya veréis por qué.

INGREDIENTES (para 2 personas):

- 150 grs. de arroz redondo
- 250 ml. de vino blanco
- 300 ml. de caldo de pollo
- 90 grs. de jamón picado (viene ya en paquetes)
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Queso rallado (parmesano le va perfecto)


PREPARACIÓN:

Picamos la cebolla y los ajos y los ponemos a rehogar en la olla a presión. 

Cuando vemos que la verdura está pochada le añadimos el jamón y el arroz y removemos hasta que este último empiece a transparentar.

Ahora le añadimos el vino blanco y lo dejamos hasta que evapore el alcohol.


Por último se cubre con el caldo, removiemos bien y cerramos la olla.



Desde que suben los dos anillos lo dejamos 8 minutos y esperamos a que bajen.


Tened en cuenta que cada olla rápida es un mundo y la primera vez os tocará probar con diferentes tiempos. Si tenéis la Wmf Perfect ya tenéis la medida exacta.

Ya sólo queda añadirle el queso y a disfrutar.

¿Os animáis a probar?

lunes, 10 de marzo de 2014

Huesitos caseros

A quién no le gusta los huesitos de toda la vida, con sus barras de barquillo y ese chocolate que los cubre. Pues bien hoy os ofrezco la posibilidad de hacerlos vosotros mismos, de forma muy fácil y ya veréis que con un resultado envidiable.


Lo primero deciros que en mi caso no me quedaron exacatamente como los comprados por un sencillo motivo las obleas de helado eran cuadradas y lo ideal, si queréis que sean como las auténticas, es que sean rectangulares (creo que en Mercadona las venden así) pero os puedo asegurar que a nadie que las probó se quejó al respecto.

INGREDIENTES:

- 1 paquete de obleas de helado
- Nocilla® (Nutella® o similar)
- 150 grs. de chocolate para fundir
- 1 cucharada de aceite de girasol


PREPARACIÓN:

Lo primero será untar las obleas de helado con la Nocilla hasta formar cuatro capas, presionando bien para que se peguen todas ellas. Si sobresale algo no pasa nada ya que con un cuchillo untaremos también los bordes.

Repetiremos con todas las obleas.

Una vez untadas las meteremos en el frigorífico una media hora para que se endurezca el chocolate y así poder partirlas con mayor facilidad.


Pasado ese tiempo haremos los cortes de las obleas. 

Como os he comentado antes, yo al usar las cuadradas las partí en dos, pero si usáis la rectangular, los debéis partir en tres y así tendrán la misma forma que los originales.

Ahora será el turno de calentar el chocolate para fundir. Podéis usar chocolate con leche, chocolate negro o incluso blanco, el que más os guste. Yo usé un chocolate con leche y lo hice en el microondas. Si lo hacéis así, os recuerdo que cada 30 segundos hay que sacarlo y removerlo para que no se queme.


Con el chocolate fundido añadí una cucharada de aceite de girasol para darle más brillo.


Ya sólo queda darles un ligero baño de chocolate y dejarlos enfriar para que el chocolate endurezca.



A mi me salieron 8 huestios y os puedo asegurar que duraron muy poco. Es lo que tiene el chocolate que no hay quién se resista.

¿Os animáis a probar?

lunes, 3 de marzo de 2014

Patatas guisadas con salchicha fresca

Como he comentado muchas veces los platos de cuchara son mi debilidad y entre ellos los guisos se llevan la palma. Pues hoy se trata de patatas con un acompañamiento no muy habitual y que tal vez por eso nos gustó tanto, salchicha fresca.


Este tipo de platos tiene una ventaja muy clara, y es que todo va a la olla y en pocos minutos tienes un plato riquísimo.

INGREDIENTES (para 2 personas):

- 4 patatas medianas
- 1/2 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1/2 pimiento rojo
- 2 zanahorias
- 6 salchichas frescas
- Pimientón dulce 


PREPARACIÓN:

En la propia olla donde vamos a hacer el guiso, rehogamos la cebolla, el pimiento y el ajo, que habremos picado previamente y salpimentamos.


Ahora es el momento de añadir las salchichas troceadas hasta que se doren un poco.


Finalmente incorporamos las zanahorias y las patatas. Aquí el corte de la patata es importante. Debemos hacerlo en cachelos, es decir, un corte irregular que se consigue metiendo el cuchillos a la patata hasta que se escucha un chasquido, lo que logramos es que la patata suelte su almidón y de esta forma espesar la salsa.


Ya sólo queda rectificar de sal, añadir dos cucharadas de pimentón e incorporar el agua.


Tapamos la olla y dejamos subir las dos anillas. Una vez hayan subido apagamos y esperamos a que bajan, así de rápido.


Procurad no echar demasiado agua no nos interesa que las patatas naden, más bien, que la salsa esté espesita, de esta forma el sabor será mucho más intenso.

Serviremos bien calientes que en este tiempo con el frío que hace es lo que apetece y a disfrutar de la cuchara.

¿Os animáis a probar?