No podía pasar el verano sin poner unos de los platos estrella (en mi caso vaso estrella) de esta época, obligado tenerlo en la nevera bien fresquito para acompañar a cualquier comida o cena, o simplemente para refrescarnos a cualquier hora del día.
Me imagino que la receta varía según quién la haga. Cada uno tiene sus truquillos y sus cantidades. Yo os pongo la mía y luego cada uno que pruebe, quite o añada lo que desee para que quede al gusto de todos.
INGREDIENTES:
- 3 o 4 tomates grandes (bien maduros)
- 1 diente de ajo
- 1/4 cebolla
- 1 trocito pequeño de pimiento verde
- 1 trocito pequeño de pimiento rojo
- 1 pepino
- Sal gorda
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 4 cucharadas de vinagre de vino
- Agua
- Agua
PREPARACIÓN:
Podéis usar una batidora de toda la vida, un vaso batidor o la thermomix, el resultado será igual de bueno.
Decir que los tomates los podéis pelar y así evitamos encontrarnos alguna piel. Yo si lo hago en casa con la thermomix reconozco que no los pelo, ya que queda muy picadito y me gusta encontrarme algún trocito.
Añadimos todos los ingredientes y batimos. Así de sencillo.
La cantidad de agua dependerá de la textura que nos guste. Os aconsejo que no echéis demasiada en un primer momento y si luego debéis añadir más no pasará nada.
La cantidad de agua dependerá de la textura que nos guste. Os aconsejo que no echéis demasiada en un primer momento y si luego debéis añadir más no pasará nada.
Hay gente que incorpora algo de pan (le va muy bien alguna rebanada de pan tostado) pero a mi me gusta sin nada y el espesor es perfecto.
Si a alguien le gusta más clarito, con añadir un poco más de agua, se arregla.
Ya solo queda llevar a la nevera o servir con unos cubitos de hielo si no queremos esperar y a disfrutar.
¿Os animáis a probar?
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