lunes, 18 de octubre de 2021

Masa de hojaldre

La masa de hojaldre está formada por capas finas de masa y grasa que al ser cocinada nos da como resultado miles de capas crujientes y uniformes. Por su puesto, se puede usar tanto en dulce como en salado.

Es cierto que es un proceso laborioso y sobretodo largo, ya que vamos a darle 6 pliegues, pero el resultado es único.

INGREDIENTES:

- 250 grs. de harina normal
- 250 grs. de harina de fuerza
- 400 grs. de mantequilla fría
- 250 grs. de agua (mejor fría)
- 10 grs. de sal

PREPARCIÓN:

Bloque de mantequilla:

Vamos a comenzar preparando el bloque de mantequilla. Para ello ponemos la mantequilla (400 grs.) entre dos papeles de horno y con el rodillo vamos golpeando y aplanando hasta conseguir un cuadrado de aproximadamente 1 cm de grosor y con una medida aproximada de 15 x 15 cm. Reservamos en el frigorífico.


 Masa inicial:

Vamos a mezclar los dos tipos de harina (250 grs. + 250 grs.) con la sal (10 grs.) y poco a poco vamos a vertiendo el agua (250 grs.). Debemos mezclar hasta conseguir que se integren todos los ingredientes.

Podemos usar un robot de cocina. Por ejemplo con la Thermomix mezclamos primero todos los ingredientes durante 15 segundos a velocidad 6, para finalmente amasar durante 2 minutos a velocidad espiga.


Envolvemos la masa en papel film y llevamos al frigorífico durante al menos 45 minutos.


Integrar el bloque de mantequilla en la masa:

Enharinamos la mesa de trabajo y ponemos nuestra masa. Estiramos con un rodillo hasta lograr un rectángulo. 

Colocamos el bloque de mantequilla en el centro de la masa y envolvemos hasta conseguir un paquete. Es importante sellar bien los extremos y el centro.



Pliegues:

Giramos la masa un cuarto, en el sentido contrario a las manecillas de un reloj, para que la apertura del medio queda en posición vertical, y con el rodillo presionamos del centro hasta los extremos para integrar toda la mantequilla. Finalmente estiramos hasta lograr un rectángulo que sea triple de largo que de ancho y de 1 cm de grosor.

Dar un cuarto de vuelta a la masa, en el sentido contrario a las manecilla del un reloj, estirar un poco la masa a lo ancho y doblamos la masa en tres: el tercio derecho hacia el centro y seguidamente el tercio izquierdo sobre el pliegue derecho. Este será nuestro primer pliegue.


Volvemos a espolvorear harina en la mesa y repetimos el proceso. Estiramos hasta obtener triple de largo que de ancho, giramos la masa un cuarto (sentido contrario del reloj) y volvemos a doblar en tres: el tercio derecho hacia el centro y seguidamente el tercio izquierdo sobre el pliegue derecho (retirando el exceso de harina). Será nuestro segundo pliegue.



Envolvemos en papel film y llevamos al frigorífico al menos media hora.

El sistema vamos a repetirlo dos veces más. De forma que cada dos pliegues llevaremos al frigorífico durante 30 minutos. Así haremos el 3º y 4º pliegue. Llevamos al frigorífico . Y repetimos 5º y 6º pliegue. Volvemos a envolver en papel film y llevamos al frigorífico 30 minutos antes de utilizarlo.


Ya podemos usar nuestra masa tal y como hacemos con las que compramos.



En esta ocasión preparé unos croissants. Estiré la masa y corté unos triángulos para luego darle la forma. Se pintan de huevo y se llevan al horno durante 20 minutos a 200ºC.



Si no vamos a utilizar la masa en esos momentos, podemos tenerla en el frigorífico durante 4 o 5 días, bien tapada con film, o incluso congelarla durante 1 mes.

Receta laboriosa pero muy satisfactoria. Es un auténtico lujo poder preparar tu propio hojaldre.

¿Os animáis a probar?

2 comentarios:

  1. Si te pones a fabricar masa de hojaldre, me convences de todas todas de que eres un profesional de la repostería, pocos se atreven con ella, ya que es laboriosa y no siempre queda bien. A ti, por lo que veo, te ha quedado perfecta, no estará rica ni ná.
    Un saludo.

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    1. No es para tanto, es laboriosa ya que hay que darle su tiempo, pero nada más... Muchos besos

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