El plato de hoy lo tiene todo, es sano, fácil y rápido de preparar, pero es que además de todo esto, está buenísimo. Los guisantes son nos aportan vitaminas y fibra por lo que son ideales para una alimentación sana.
Podemos usarlos frescos, congelados o incluso de lata, como mejor nos venga, y con un poco de jamoncito y el toque del huevo, tenemos un platazo en nada de tiempo.
INGREDIENTES (para 2 personas):
- 250 grs. de guisantes
- 1/4 cebolla
- 1 diente de ajo
- Jamón serrano
- 2 huevos
- Pimentón
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
PREPARACIÓN:
Si los guisantes son frescos o congelados, lo primero será ponerlos a hervir en una olla durante 6 - 8 minutos. Reservamos.
En caso de utilizar guisantes de bote pasamos al siguiente paso.
Cortamos la cebolla y el ajo y la rehogamos en un poco de aceite de oliva. Cuando veamos que se pone transparente le añadimos una cucharada de pimentón.
Sin dejar que se queme, le damos vueltas y le añadimos los guisantes. Salpimentamos al gusto.
Dejamos que se cocinen durante un minuto y le añadimos el jamón picado.
Por otro lado, vamos preparando los huevos pochè.
Podéis ver la receta pinchando aquí.
Es muy fácil, ponemos un cazo con agua a hervir. En una taza ponemos papel transparente, untamos con un poco de aceite y volcamos el huevo dentro. Cerramos con una pinza y lo llevamos al agua durante 4 minutos.
Dentro del huevo podemos añadir, sal, pimienta, alguna especia o incluso jamón o bacon, para tunearlo un poco.
Bien calientes servimos los guisantes y colocamos los huevos sobre éstos. Justo antes de servir rompemos el huevo para que la yema salga y a disfrutar.
Platazo en tiempo record!!!
¿Os animáis a probar?