Hoy es el cumpleaños de mi mujer, que está hecha una niña y sólo cumple 40!!!! y qué mejor que celebrarlo con una tarta...
Me encantan las tartas que no llevan horno, ya que son muy fáciles de preparar y siempre quedan bien. En esta ocasión la vamos a hacer de dulce de leche, muy usado en latinoamérica, que no deja de ser una variante caramelizada de la leche, y que lo hacen realmente adictivo.
El molde utilizado tiene un diámetro de 23 cm. y es desmoldable por lo que facilitando así su presentación.
INGREDIENTES:
Para la base:
- 200 grs. de galletas de avena (podemos usar otras)
- 80 grs. de mantequilla
Para el relleno:
- 500 ml. de nata para montar
- 400 ml. de leche
- 300 grs. de dulce de leche
- 2 sobres de cuajada
Crumble para decorar:
- 50 grs. de galletas
- 50 grs. de almendras o nueces (o ambas)
- 25 grs. de mantequilla
- 25 grs. de azúcar
- Canela en polvo
PREPARACIÓN (En Thermomix):
En el vaso de la thermomix trituramos las galletas a vel. 5 y la mezclamos con la mantequilla derretida. Presionamos bien ayudándonos del culo de un vaso para cubrir la base del molde.
A continuación, con el vaso limpio echamos el dulce de leche, la nata, la leche, el azúcar y los sobres de cuajada, durante 8 minutos, 90ºC a vel. 5.
Una vez tengamos la mezcla la volcamos sobre la base de galletas. Para ello, utilizaremos una cuchara del revés, de este modo no se nos romperá la galleta.
Dejamos templar un poco, y lo llevaremos al frigorífico durante al menos 4 horas. Yo suelo dejarlo de un día para el otro.
PREPARACIÓN (Clásica):
Trituramos las galletas con ayuda de una batidora y mezclamos con la mantequilla derretida. Presionamos bien ayudándonos del culo de un vaso para cubrir la base del molde.
A continuación, en una olla vertemos el dulce de leche, la nata y la leche (removemos bien hasta que el turrón se deshaga). Reservamos medio vaso de leche para disolver los polvos de la cuajada y lo añadimos a la mezcla anterior.
Por último, echamos el azúcar removiendo bien para que no se pegue, hasta que hierva.
Una vez tengamos la mezcla la volcamos sobre la base de galletas. Para ello, utilizamos una cuchara del revés, de este modo no se nos romperá la galleta.
Dejamos templar un poco, y lo llevamos al frigorífico durante al menos 4 horas. Yo suelo dejarlo de un día para el otro.
PREPARACIÓN DEL CRUMBLE:
En un bol picamos las galletas y los frutos secos. El tamaño un poco al gusto. En este caso los hice bastantes grandes, pero en futuras ocasiones lo picaré un poco más que queda más elegante.
Después añadimos el azúcar, la canela el polvo y la mantequilla a temperatura ambiente. Mezclamos bien con un tenedor y ya lo tenemos listo.
Perfecto para rematar nuestra tarta.
******
Con la tarta bien fría repartimos el crumble por encima en el momento de servir y a disfrutar.
Tiene un sabor que la hace realmente adictiva...
... y el toque de crumble crujiente le da un punto fantástico.
¿Os animáis a probar?
No hay comentarios:
Publicar un comentario