Muchas veces preparamos recetas a la carbonara y nos encontramos ingredientes que no deberían estar ahí, por ejemplo la nata, ya que la receta original no sólo no lleva nata, sino que tampoco lleva la clara del huevo.
Vais a ver que es una receta muy sencilla, que se prepara en poco más de 15 minutos y el resultado es unos espaguetis con una salas melosa y un sabor fantástico.
INGREDIENTES (para 2 personas):
- 200 grs. de espaguetis
- 100 grs. de guanciale o panceta
- 60 grs. de queso pecorino o parmesano
- 4 yemas de huevo
- Pimienta negra
- Agua y sal gorda para la cocción
PREPARACIÓN:
Vamos a comenzar cociendo la pasta. Para ello ponemos agua en una olla y le añadimos sal gorda para la cocción. Tendremos los espaguetis el tiempo que nos diga el fabricante (aproximadamente 10 minutos).
Es muy importante que el agua de la cocción de la pasta no la tiremos ya que la utilizaremos más adelante.
Mientras la pasta se cuece, vamos a preparar nuestra carbonara.
Para ello, vamos a cortar nuestra panceta.
Quitamos la parte más dura de la piel que no vamos a tirar sino que la ponemos en nuestra sartén, así se hará la panceta con su propia grasa.
Cortamos la panceta en tacos y sofreímos hasta que se doren.
A continuación, mezclamos en un bol las yemas con el queso pecorino. Si no encontramos pecorino, podemos usar parmesano o incluso grana padano. Pero os aconsejo probar el queso pecorino, ya que le aporta otro gusto.
Vamos a tener una mezcla muy compacta. Para que quede más ligera le vamos a añadir la pimienta negra y una cucharada de la cocción de la pasta. Y mezclamos bien. Este es el gran secreto de los carbonara.
Volvemos a nuestra sartén con la panceta. Retiramos la piel y añadimos los espaguetis directamente desde la olla de cocción. Los salteamos bien hasta que quede perfectamente mezclado.
A continuación, se apaga del fuego. Esto es muy importante.
Ahora añadimos la salsa de yemas y queso a nuestra sartén y le añadimos nuevamente una o dos cucharadas de la cocción de la pasta, hasta lograr una salsa suave y brillante.
Emplatamos y si queremos podemos rallar un poco más de queso antes de servir.
El color es espectacular y el sabor ni os cuento.
Si nunca habéis preparado así la carbonara os invito a hacerlo porque no tiene nada que ver con otras, y ésta sí es la forma genuina de hacerla.
¿Os animáis a probar?
Pues mira yo los preparo con nata porque así lo aprendí y aunque en casa gustan, a mi me parecen muy pesados. Gracias por tu receta, es mucho más rica y ligera.
ResponderEliminarUn beso.
Si un italiano te ve utilizar la nata...te dirá de todo...jeje. A mi también me gustan mucho más así. Besos
EliminarLa pinta es inmejorable. La verdad es que nunca los he preparado así, los probaré.
ResponderEliminarSaludos
Para mí son menos pesados y con más sabor, ya me contarás si los pruebas. Un saludo
EliminarEste es uno de mis platos preferidos. ¡Cómo te han quedado!¡Menuda pinta más buena!
ResponderEliminarY míos, jeje...buenísimo. Saludos
EliminarLos preferido de mi hijo, le encantan!! Bs.
ResponderEliminarSergio ya tienes una seguidora más y te visitare cada vez que pueda.
ResponderEliminarMe gusta mucho la pasta, tu receta genial.
Feliz Semana santa
Muchas gracias Trini, me alegra que te haya gustado el blog. Me pasaré por tu grupo de Facebook. Bienvenida. Bs
EliminarSi quieres publicar tus recetas en un grupo de recetas de cocina, te dejo el enlace.
ResponderEliminarhttps://www.facebook.com/groups/185012434898921/