La Apple Pie o tarta de manzana americana es una de las tartas más deliciosas que he probado, ya que combina a la perfección el sabor a mantequilla, a canela y a manzana.
Lo ideal es comerla templada e incluso acompañada con una bola de helado, convirtiéndolo en un postre sublime.
INGREDIENTES:
Para la masa:
- 300 grs. de harina
- 200 grs. de mantequilla
- 100 ml. de agua
- 1/2 cucharadita de sal
- 1 huevo y una cucharada de agua para pintar la masa
Para el relleno:
- 5 o 6 manzanas (mejor alguna variedad algo ácida)
- 110 grs. de azúcar
- 25 grs. de maicena
- 1 pizca de sal
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 90 grs. de arándanos secos
- Zumo de 2 naranjas
PREPARACIÓN (En Thermomix):
Lo primero será poner a remojo los arándanos secos en zumo de naranja. Mejor si están de la noche anterior.
Comenzamos preparando la masa.
Ponemos en el vaso la harina, la mantequilla, el agua y la sal. Mezclamos durante 10 segundos a velocidad 6. Y seguidamente 1 minuto a velocidad espiga.
Sacamos la masa a un bol hasta conseguir una bola compacta y homogénea.
La envolvemos con papel film y llevamos al frigorífico durante 30 minutos.
PREPARACIÓN (Clásica):
Lo primero será poner a remojo los arándanos secos en zumo de naranja. Mejor si están de la noche anterior.
Comenzamos preparando la masa.
Para ello vamos a mezclar la harina, con la mantequilla, el agua y la sal. Se puede mezclar con la ayuda de un tenedor o utilizar algún robot de cocina. El resultado debe ser una masa compacta y homogénea.
La envolvemos con papel film y llevamos al frigorífico durante 30 minutos.
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A continuación preparamos el relleno.
Pelamos las manzanas y las quitamos el corazón. A continuación cortamos en láminas del mismo grosor y las volcamos en un bol amplio.
Le añadimos el azúcar, la maicena, la pizca de sal y la canela en polvo. Removemos bien hasta que todas las manzanas se impregnen de la mezcla.
Reservamos.
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Vamos con nuestra masa. Enharinamos nuestra mesa de trabajo y partimos nuestra masa en dos, dejando un trozo algo mayor para la base.
Estiramos con la ayuda de un rodillo, lo suficiente para que se cubra nuestro molde y sobre por los laterales. En esta ocasión he utilizado un molde de 23 cm.
A continuación volcamos las manzanas que teníamos reservadas y también los jugos que ha podido soltar.
Encima de ellas vamos a poner los arándanos secos. Para ello simplemente pasamos los arándanos por un colador.
Estiramos el trozo más pequeño de masa y lo colocamos por encima.
Para darle un toque más rústico, simplemente doblamos la masa de fuera hacia adentro.
Batimos el huevo y una cucharada de agua y pintamos nuestra tarta.
Le damos unos cortes, tanto en el centro como en los laterales y llevamos al horno que lo tendremos precalentado.
Horneamos durante 1 hora aproximadamente a 180ºC.
Debe quedarnos la manzana hecha, que no se deshaga y la masa perfectamente cocida.
Podemos tomarla a temperatura ambiente o templada...
Os va a fascinar una tarta tan fácil de preparar con un sabor fantástico que la hacen realmente adictiva.
Sin duda una de las más ricas que he probado y la combinación con los arándanos es fantástica.
¿Os animáis a probar?
